El favorito de los expertos en piel, el carbón activado es un tipo especial de carbón obtenido mediante un proceso de quema que mantiene su porosidad, lo que le permite absorber selectivamente gases, líquidos o impurezas tóxicas. Pero, ¿por qué la gente utiliza el carbón activado para la piel? ¿Existen beneficios?
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El carbón activado se utiliza comúnmente en casos de envenenamiento e intoxicación, ya que se une a sustancias tóxicas, evitando que el cuerpo las absorba. Y es precisamente por esta razón que la industria cosmética está reconociendo sus ventajas para la belleza.
¿Cuáles son los beneficios del carbón activado para la piel?
El uso de dermocosméticos con carbón activado va más allá de la limpieza. Su uso continuo combate la flacidez, las arrugas y ese tono grisáceo que resulta tan molesto. Esto se debe a que, al igual que se une a sustancias tóxicas para prevenir el envenenamiento, también atrae y elimina toxinas que afectan y dañan la piel. Esto incluye la contaminación, los residuos de maquillaje y el exceso de sebo.
De esta manera, el carbón es un super desintoxicante, capaz de eliminar la “suciedad” más perjudicial. Es el purificador ideal que prepara la piel para recibir sus cuidados diarios y potenciar los resultados de las cremas, sueros e hidratantes.
¿Cómo se puede utilizar?
En las farmacias de manipulación, el elemento se puede formular en mascarillas peel-off. Se puede usar antes de un evento o una vez a la semana: vale la pena incorporarlo a tu rutina de belleza.
También se puede formular en jabones diarios y exfoliantes. Se recomienda la formulación, ya que solo en este tipo de farmacia se puede solicitar que la fórmula se enriquezca con activos hidratantes, reafirmantes e iluminadores.
